Los 25 Días de la Tierra
Más de 90 estándares que aseguran un ambiente más limpio.
El 22 de abril de 2015, más de mil millones de personas de 192 países participarán en la celebración anual del Día de la Tierra. En la actualidad, en su aniversario n.° 45, el Día de la Tierra promueve el aprecio y la protección del medioambiente del planeta.1
Mucho ha cambiado desde que se estableció el Día de la Tierra en 1970, el año en que muchos consideran que se produjo el nacimiento del movimiento medioambiental moderno. Ese mismo año, se creó la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) de los EE.UU., y a dicha agencia se le encomendó la tarea de eliminar y evitar problemas futuros en relación con el medioambiente. La contaminación atmosférica, la contaminación de los sitios de construcción y de los acueductos y otros problemas importantes amenazaban la salud del medioambiente y la seguridad de las personas de todo el mundo.
Durante los últimos 45 años, se ha llevado a cabo un avance significativo en el tratamiento de estos y muchos otros desafíos ambientales. Actualmente, respiramos aire más puro, en parte gracias a innovaciones tales como depuradores industriales para chimeneas y convertidores catalíticos para automóviles. Mediante su programa Superfund, la EPA ha trabajado de manera diligente para contener los depósitos de desechos peligrosos del país, lo que a su vez ha ayudado a restablecer la salud medioambiental y económica de numerosas comunidades urbanas y rurales.2
Comité E50 de la ASTM: Socio para el Cambio Positivo
Desde 1990, un comité técnico de la ASTM ha suministrado normas esenciales que ayudan a las autoridades reguladoras federales y estatales y al sector industrial a resolver los desafíos medioambientales.
Este comité es el Comité E50 de la ASTM sobre Evaluación Medioambiental, Gestión de Riesgos y Medidas Correctivas; sus normas guían a las partes interesadas en los aspectos importantes de la gestión medioambiental y satisfacen las cambiantes necesidades del dinámico entorno regulatorio.
La expresidente del Comité E50, miembro actual y exmiembro de la junta de la ASTM, Julie Kilgore, describió en pocas palabras la exclusiva función que desempeña el comité en el ámbito del medioambiente durante una entrevista en 2011 con SN:
El Comité E50 tiende a aventurarse en aguas revueltas, en las que las cuestiones emergentes no están bien definidas y no se han establecido métodos estándar, observó Kilgore, presidente de Wasatch Environmental in Salt Lake City, Utah. Muchas de las normas elaboradas por el Comité E50 se relacionan con sistemas, condiciones y asuntos complejos, en los que la opinión profesional en situaciones únicas es una demanda de rutina. El trabajo del comité es significativo porque salva las brechas que dejan las reglamentaciones de las agencias o responde a las necesidades del sector cuando se está desarrollando la reglamentación y explica realmente a las partes afectadas los pasos específicos que deben seguir para manejar el riesgo medioambiental.
Mientras el Comité E50 celebra este año su 25.° aniversario, los más de 1,000 expertos técnicos que integran su membresía pueden reflexionar en un grupo de trabajo que ha contribuido a lograr un medioambiente más saludable en todo el mundo.
Respecto de temas medioambientales críticos, el Comité E50 ha introducido una nueva manera de pensar. Los esfuerzos del comité han generado numerosas normas para cuencas que han cambiado la manera en que realizamos las evaluaciones medioambientales del sitio, las limpiezas en las áreas petroleras, las pruebas de contaminantes y mucho más, señala Dennis Rounds, presidente del Comité E50 y gerente de proyectos en Morris Inc., Pierre, Dakota del Sur.
Llamado a la Acción para Depósitos Subterráneos
Uno de los primeros problemas medioambientales abordados por el Comité E50 fue el riesgo que representan los depósitos subterráneos que almacenan gasolina y petróleo. Estos depósitos pueden tener filtraciones y contaminar las aguas subterráneas de las comunidades locales. La liberación de una pequeña cantidad de petróleo de un tanque de depósito subterráneo en una gasolinera local constituye un peligro para el medioambiente y las personas que viven en el área circundante.
En 1984, la EPA había comenzado a llevar a cabo un mandato legislativo para regular los tanques de depósito subterráneo de todos los Estados Unidos. A través del fondo fiduciario para Tanques de Depósito Subterráneo con Fuga (LUST, por sus siglas en inglés), también establecido por el Congreso, la EPA recibe aproximadamente $100 millones por año para prevenir, detectar y limpiar los derrames de los tanques de depósito subterráneo regulados por el gobierno federal. Una de las primeras normas del Comité E50, E1990 para realizar evaluaciones de los sistemas de depósito subterráneo, supuso un apoyo valioso a los esfuerzos de la EPA. La E1990 guía a los propietarios de los depósitos, a los operadores y a los demás usuarios con respecto a las prácticas de gestión y los requisitos de los tanques de depósito subterráneo. En la actualidad, la E1990, que fue revisada por última vez en 2014, es citada en el Código de Reglamentos Federales de los EE.UU. como una herramienta para lograr la conformidad operativa con las reglamentaciones que rigen los tanques de depósito subterráneo.
Otras normas recientes del Subcomité E50.01 sobre Tanques de Depósito incluyen la norma E2681 para la gestión medioambiental de los sistemas de tanques de depósito subterráneo en los que se almacenan sustancias peligrosas, norma que guía la prevención de derrames ambientales y la respuesta a ellos, y la norma E2256 para la integridad hidráulica de los fondos de depósito no subterráneo nuevos, reparados o reconstruidos.
Normas para Cuencas con Medidas Correctivas
A mediados de la década de 1990, la participación del Comité E50 en los esfuerzos por regular y gestionar mejor los riesgos asociados con los tanques de depósito subterráneo sentó la base de la publicación de una de sus normas emblemáticas. El comité vio la oportunidad de brindar orientación sobre el uso de medidas correctivas basadas en el riesgo (o RBCA, por sus siglas en inglés) en los sitios de derrames de petróleo. Las RBCA clasifican los sitios según el riesgo y permiten a las partes interesadas asignar recursos para lograr la máxima protección de la salud humana y del medioambiente. También describen el nivel adecuado de control y permiten que las medidas correctivas avancen rápidamente.
Para impulsar la implementación de la estrategia de RBCA, el Comité E50 desarrolló la norma E1739 para medidas correctivas basadas en el riesgo aplicadas a los sitios con derrames de petróleo. La E1739 ayuda a las entidades reguladoras a tomar decisiones de gestión confiables y coherentes para una variedad de sitios petroleros mediante el uso de un método de tres etapas para recopilar datos y analizar el sitio, en el que cada etapa hace referencia a un nivel diferente de complejidad.
La E1739 es una norma innovadora que cambió la manera en que enfocamos el proceso de limpieza en los sitios petroleros, indica Rounds. Respalda la aplicación del sentido común y de la ciencia, y permite a las entidades reguladoras y a otras partes interesadas evaluar proyectos desde el punto de vista del riesgo y la exposición.
Tripp Fischer, presidente del Subcomité E50.04 sobre Medidas Correctivas y gerente de proyecto en Brownfield Science Technology Inc., Cochranville, Pensilvania, agrega: La E1739 transformó verdaderamente el proceso de limpieza en los sitios petroleros. Con una enorme cantidad de sitios, no es viable la implementación de solo una estrategia de limpieza. La E1739 asiste a las entidades reguladoras en la evaluación de los sitios desde el punto de vista de la salud humana y las ayuda a identificar y a eliminar las vías de exposición.
Casi los 50 estados de los Estados Unidos han usado total o parcialmente la E1739 como base para sus medidas correctivas medioambientales. Esto ha permitido a las agencias medioambientales de los estados manejar de manera más eficaz las limpiezas del medioambiente a través de porcentajes de procesamiento de casos más rápidos, una reducción de los costos para las limpiezas medioambientales y una asignación de recursos más efectiva a los sitios con mayores riesgos. La cartera de normas de RBCA del Comité E50 también incluye la norma E2081, que aborda otras sustancias químicas además del petróleo, la norma E2205, que analiza los receptores ecológicos, y otras normas relacionadas.
Norma E1527: el Lenguaje Común para la Evaluación Medioambiental del Sitio
Durante la década de 1990, el Comité E50 comenzó a trabajar en una nueva norma que se convertiría en la guía de facto para la evaluación medioambiental del sitio. En ese momento, existía la necesidad apremiante entre grupos involucrados en transacciones inmobiliarias comerciales —bancos, compañías de seguros, compradores, asesores medioambientales, abogados y otras entidades— de establecer un proceso para realizar una inspección medioambiental que satisficiera los requisitos de la EPA, según la Ley de Respuesta Medioambiental Exhaustiva, Compensación y Responsabilidad Pública (CERCLA, por sus siglas en inglés).
Con el objeto de ayudar a las partes a evaluar la condición medioambiental de los inmuebles comerciales, el Comité E50 desarrolló la norma E1527 para la fase I del proceso de evaluación medioambiental del sitio. La E1527 suministra coherencia universal a la primera fase de identificación del potencial de derrames de sustancias peligrosas o productos de petróleo que podrían involucrar responsabilidad para los nuevos dueños de propiedades.
Durante las últimas dos décadas, la norma E1527, publicada por primera vez en 1993, ha ejercido cada vez más influencia en el sector inmobiliario comercial de los EE.UU. y de todo el mundo. Prevista en un principio para asistir a los propietarios, la norma E1527 sirve ahora como una herramienta básica para compradores, entidades crediticias y entidades reguladoras involucrados en transacciones comerciales de bienes inmuebles. A fines de 2013, la EPA publicó una regla definitiva que hace referencia a la versión de la norma E1527 de ese año para el desarrollo de evaluaciones medioambientales de sitio. Con esta regla, los usuarios pueden cumplir con los requisitos de la EPA en cuanto a la realización de «todas las investigaciones adecuadas» de acuerdo con lo contemplado por la CERCLA.
Damian Wach, AIA, vicepresidente, Prudential Mortgage Capital Company en Newark, Nueva Jersey, considera a la norma E1527 el «libro de normas» de las transacciones comerciales de bienes inmuebles. Todos los años, existen miles de millones de dólares de transacciones comerciales de bienes inmuebles en todos los EE.UU. que dependen de la norma E1527 de la ASTM. En el sector inmobiliario, es ampliamente aceptado el hecho de que cualquier inspección medioambiental de una propiedad comercial a los fines de una venta deba cumplir con los requisitos mínimos de la norma E1527. La norma de la ASTM es esencialmente el libro de normas y lenguaje común que todas las partes han aceptado respetar en el proceso de diligencia debida, explica Wach.
Para ayudar a la amplia variedad de interesados que utilizan la E1527, la ASTM International ofrece una gama de cursos de capacitación técnica y profesional. En estos cursos, también se abordan las normas complementarias de la norma E1527, incluida la norma E1528, para el proceso de inspección de las transacciones de diligencia debida medioambiental limitada, y la norma E1903, para la fase II del proceso de evaluación medioambiental del sitio.
Estrategias Innovadoras de Remediación
Una norma recientemente publicada del Subcomité E50.04 tiene como objetivo transformar aún más el proceso de toma de decisiones de limpieza de los sitios petroleros. La norma E2856 para la estimación de la transmisibilidad de los líquidos livianos en fase no acuosa (LNAPL, por sus siglas en inglés) asiste a profesionales especializados en medioambiente a fin de que entiendan cómo los productos derivados del petróleo fluyen a través de la subsuperficie.
La transmisibilidad de los LNAPL es la velocidad a la que un volumen de líquido liviano en fase no acuosa, tal como el petróleo, fluye través de una unidad del ancho de un material poroso, como el suelo. La capacidad de medir la transmisibilidad de los LNAPL es un aspecto importante del trabajo de evaluación medioambiental.
Al calcular esta velocidad, los ingenieros y los geólogos pueden tomar mejores decisiones con respecto a la selección y al diseño de las tecnologías para la remediación del subsuelo y determinar el momento en que una recuperación hidráulica deja de ser práctica, explica Fischer. La norma E2856 ayudará a los usuarios a utilizar los datos existentes o a realizar experimentos de campo necesarios para calcular la transmisibilidad y para validar si las suposiciones hechas en los cálculos coinciden con las observaciones en el campo.
Otras dos normas recientemente publicadas del Subcomité E50.04 también están promoviendo el establecimiento de metas medioambientales al facilitar aquellas limpiezas que reducen la exigencia sobre recursos naturales y disminuyen las emisiones al medioambiente. La norma E2893 para limpiezas más ecológicas suministra un proceso con el objeto de evaluar, implementar, documentar e informar las actividades que reduzcan el impacto medioambiental de una limpieza. Su norma complementaria es la E2876 para la integración de los objetivos sostenibles en la limpieza.
Contribución a Infraestructuras Sustentables
Las diversas contribuciones del Comité E50 también se extienden al entorno construido, donde las normas del comité apoyan la beneficiosa reutilización de los subproductos industriales en la construcción de infraestructura civil. Entre los materiales industriales reciclados más utilizados en la construcción de infraestructura, se encuentran las cenizas volantes de carbón. Como producto natural del proceso de combustión del carbón, las cenizas volantes son elogiadas en todo el mundo por sus beneficios, como un material de construcción verde que reduce la demanda de cemento portland con alto contenido de carbono.
El Subcomité E50.03 sobre Utilización Beneficiosa promueve a las partes interesadas del sector a que usen cenizas de carbón a través de las normas, como la norma E2277 para el diseño y la construcción de rellenos estructurales de cenizas de carbón. Publicada en 2014, esta norma es de suma utilidad para la ceniza volante de carbón como relleno estructural para construcción de sitios y cimientos, terraplenes para autopistas y vías ferroviarias, bases de carreteras, diques y represas.
Transformación de Rellenos Sanitarios en Parques
El Subcomité E50.03 también está ayudando a transformar los rellenos sanitarios y las propiedades impactadas químicamente en sitios recién restaurados para uso público y privado. El comité está elaborando una guía, que es la primera de su tipo (WK42846), que se centra en la restauración de sitios de depósito de residuos en parques públicos o comerciales. Los miembros del subcomité incluyen las entidades reguladoras federales, estatales y locales, así como los representantes de las industrias de residuos, de transporte y del carbón.
La norma cubrirá una necesidad importante de las entidades reguladoras gubernamentales al proporcionar un proceso gradual para restaurar esos sitios y darles un uso productivo. Las ciudades y los pueblos más pequeños con recursos medioambientales limitados podrán atenerse a la norma como una forma para reducir la cantidad de estos sitios abandonados y crear oportunidades para fomentar el desarrollo económico y la recreación pública, dice Marty Rowland, miembro del Comité E50 y gerente de proyecto ejecutivo de remediación medioambiental en el Departamento de Parques y Recreación de la ciudad de Nueva York en Queens, Nueva York.
Disminución de los Riesgos del Cambio Climático
Entre las aguas caóticas en las que el Comité E50 se ha aventurado, se encuentra el tema ampliamente debatido del cambio climático. A través de los esfuerzos del Subcomité E50.05 sobre Gestión del Riesgo Medioambiental, algunas de las normas de las ASTM guían ahora a las empresas en sus tareas de evaluación del cambio climático. Entre estas normas, cabe destacar la norma E2718 que proporciona buenas prácticas de divulgación de informes financieros en relación con el cambio climático. El sector empresarial también se beneficia de la norma E2725, para la gestión y la evaluación básicas de los gases de efecto invernadero, que promueve la toma de decisiones de tipo empresarial y la planificación estratégica para gestionar y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
El subcomité está trabajando en la elaboración de dos nuevas normas de cambio climático, incluida una guía para la integración de la gestión de riesgos del cambio climático en programas ecológicos y de sustentabilidad (WK21810) mediante proyectos de energía renovable para áreas industriales abandonadas con estrategias de gestión del riesgo climático (WK21811), y una guía para la adaptación y la mitigación de los riesgos del cambio climático (WK21812).
E50.47: el Progreso de la Ciencia de las Pruebas de Toxicidad
El subcomité más nuevo del Comité E50 se enorgullece de su propio legado al contribuir con la salud medioambiental de todo el mundo. El Subcomité E50.47 sobre Efectos Biológicos y Destino Medioambiental, un grupo que el presidente del Comité E50, Rounds, denomina el subcomité de la ciencia, se sumó al conjunto del Comité E50 en 2013, después de haber funcionado como comité principal de la ASTM (el antiguo Comité E47) con el mismo nombre durante 38 años.
El subcomité es la fuente de las primeras normas ampliamente aceptadas para evaluar la toxicidad y biodisponibilidad de contaminantes en el agua, los sedimentos y los suelos, así como su impacto en la vida acuática y terrestre. Las normas del Subcomité E50.47 han realizado un aporte significativo a fin de mejorar las condiciones medioambientales de todo el mundo.
El Dr. Chris Ingersoll, presidente del Subcomité E50.47 y toxicólogo acuático para la Encuesta Geológica de los EE.UU. en Columbia, Missouri, dice: El efecto perdurable de las normas E50.47 ha sido su capacidad para ayudarnos a comprender el efecto biológico de los contaminantes y lo que debemos hacer para que nuestros vías acuáticas sean aptas para pescar y nadar. Las normas E50.47 han sido el impulso para generar datos a fin de determinar cómo podemos establecer mejores reglamentaciones y mejorar la calidad del agua, de los sedimentos y de los suelos.
Pensar en el pasado, en cuán lejos han llegado nuestras vías acuáticas desde aquel Día de la Tierra en 1970, nos hace sentir orgullosos de los aportes que ha hecho nuestro comité, agrega Ingersoll.
El principal impulso de los esfuerzos del Comité E50.47 ha sido en relación con la toxicología de los sedimentos. El sedimento proporciona el hábitat para diversos organismos acuáticos y es un importante depósito para muchas de las sustancias químicas más persistentes que se introducen en las aguas superficiales. Las normas E50.47 suministran a la comunidad científica y reguladora las herramientas básicas para llevar a cabo pruebas de toxicidad de campo, de laboratorio y de bioacumulación de sedimentos en organismos acuáticos. Entre ellas, es necesario destacar las normas E1706 y E1367, para la medición de la toxicidad de los contaminantes asociados con los sedimentos, que abarcan los procedimientos para evaluar a los organismos marinos y de agua dulce en el laboratorio con el objeto de analizar la toxicidad de los contaminantes asociados con todos los sedimentos. Una utilidad similar proporciona la norma E1391, para la recolección, el almacenamiento, la caracterización y la manipulación de sedimentos para evaluación toxicológica, y la norma E1688, para la determinación de la bioacumulación de contaminantes asociados con los sedimentos.
Al acercarse el Día de la Tierra 2015, los problemas medioambientales del mundo son menos graves en la actualidad, aún cuando surgen nuevos desafíos. Las vastas mejoras medioambientales que se han logrado están vinculadas con las medidas concretas y conscientes que han tomado la industria, los consumidores, las entidades gubernamentales y otras partes interesadas para cumplir con el amplio mandato global de protección ambiental —el tipo de medida que el Día de la Tierra quiso transmitir desde sus comienzos en 1970. Los dedicados miembros del Comité E50 de la ASTM han estado apoyando dichas mejoras a lo largo de todo el proceso.
Rounds expresa: Durante los últimos 25 años, el Comité E50 ha demostrado un compromiso duradero con la provisión oportuna de normas que resuelvan los desafíos sentirse orgullosos de lo que se ha llevado a cabo para hacer que nuestro mundo sea más saludable y más seguro para todos.
Referencias
1. Earth Day Network
2. Agencia de Protección Ambiental de los EE.UU, “40 Years of Achievements, 1970-2010.”
Normas Citadas en Este Artículo
- E1367, Método de prueba para medir la toxicidad de los contaminantes asociados con los sedimentos en invertebrados que viven en estuarios y en el mar
- E1391, Guía para la recolección, el almacenamiento, la caracterización y la manipulación de sedimentos para hacer pruebas toxicológicas y para seleccionar los muestreadores utilizados para recoger invertebrados bentónicos
- E1527, Práctica para Evaluaciones Medioambientales de Sitios: Proceso de Evaluación Medioambiental del Sitio, Fase I
- E1528, Práctica para Diligencia Debida Medioambiental Limitada: Proceso de Inspección de las Transacciones
- E1688, Guía para la determinación de la bioacumulación de contaminantes asociados con los sedimentos en invertebrados bentónicos
- E1706, Método de prueba para medir la toxicidad de los contaminantes asociados con los sedimentos en invertebrados de agua dulce
- E1739, Guía para medidas correctivas basadas en el riesgo aplicadas a sitios con derrames de petróleo
- E1903, Práctica para Evaluaciones Medioambientales de Sitios: Proceso de Evaluación Medioambiental del Sitio, Fase II
- E1990, Guía para realización de evaluaciones de sistemas de tanques de depósito subterráneo para conformidad operativa con las regulaciones de la Parte 280 de 40 CFR
- E2081, Guía para medidas correctivas basadas en el riesgo
- E2205, Guía para medidas correctivas basadas en el riesgo para la protección de los recursos ecológicos
- E2256, Guía para integridad hidráulica de los fondos de depósitos no subterráneos nuevos, reparados o reconstruidos para servicio petrolero
- E2277, Guía para el diseño y la construcción de rellenos estructurales con cenizas de carbón
- E2681, Guía para la gestión ambiental de sistemas de tanques de depósito subterráneo que almacenan petróleo o sustancias peligrosas
- E2718, Guía de divulgación de informes financieros atribuidos al cambio climático
- E2725, Guía para la gestión y la evaluación básicas de los gases de efecto invernadero
- E2856, Guía para la estimación de la transmisibilidad de LNAPL
- E2876, Guía para la integración de objetivos sustentables en limpieza
- E2893, Guía para limpiezas más ecológicas
Doug Clauson es escritor independiente y vive en Wynnewood, Pennsylvania.